Jornadas de buenas prácticas en energía y cambio climático

El proceso en torno a la “la hoja de ruta de Cambio Climático de Navarra 2016” comenzó el pasado 22 de abril de 2016, día que en Nueva York comenzaba el periodo de ratificación de los Acuerdos de París sobre Cambio Climático. Una ruta con dos caminos paralelos y complementarios, uno de trabajo interno del Gobierno para acomodar los planes y programas a los cambios que ya se están produciendo y otro de reflexión colectiva sobre la forma de abordar los retos y oportunidades que el cambio climático nos brinda. En esta ocasión vamos a reflexionar a partir de experiencias que se han llevado a cabo en otros lugares y que nos puedan servir de referencia para elaborar nuestra propia Hoja de Ruta. La realidad es tenaz, ajena a nuestras dudas y vacilaciones. Según la NASA, desde enero hasta junio de 2016, todos los meses han batido de forma individual el anterior récord de temperatura para ese mes. Y los seis primeros meses del año 2016 se han convertido ya en la mitad de año más cálida del registro, con una temperatura media 1,5ºC por encima de la temperatura de la era preindustrial. Estamos abocados a un cambio de modelo que nos permita descarbonizar nuestra vida y adaptarnos a un clima cambiante. Este cambio es la oportunidad para repensar nuestra relación con el medio, con nuestros recursos, la energía, nuestro modelo de producción, consumo y gobernanza. Hay ayuntamientos, colectivos, entidades que han afrontado con determinación el reto y han emprendido, a pesar de la incertidumbre, caminos atrevidos. Con ellos, con ellas, queremos valorar sus experiencias y las nuestras y construir, soñar nuestro futuro.